viernes, 18 de octubre de 2013

La cola del somatén

    Hace unos cuantos trienios, el actual Tesorero y yo teníamos encomendada la recaudación voluntaria del Ayuntamiento de Pinoso. En el mostrador, entrando a la Casa Consistorial, de la izquierda, estaba la oficina donde los sufridos contribuyentes, dinero en mano, pagaban la contribución, los canalones, el agua, el impuesto de circulación, las entradas de carruajes, las rejas y balcones, etc...
    El caso que nos dejó paralizados fue que un terrateniente de Monóvar con fincas en Pinoso (más concretamente en la partida de Sonca) llegó una mañana a pagar y ante una cola considerable, cojeando se fue acercando al mostrador y dejando sobre el mármol una pistola (de calibre corto) dijo: Senyores, sóc somatén.
    Nadie le recriminó ni su "título" ni la colada. Él pagó sus impuestos y recogiendo el arma, como entró salió y aquí paz y allá Gloria. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario